Buenos días!
Pues hoy vengo con una receta (súper) autóctona de las zonas de lago en Suíza, típica de la época estival, aunque se puede comer todo el año. Los filetes de perca.
Tengo que decir, que para un gallego pues... no son el pescado más sabroso que pueda existir, pero cuando apetece pescado, es de lo poco que se puede comer en un restaurante... y no, tampoco suele ser fresco. No obstante, como digo, es una opción cuando uno se cansa de queso-patata-pasta-salchicha ;)
Un beso a todos mis amigos, mi gran familia y que siempre están a mi lado por encima de la distancia.
Ingredientes (2 pax):
4 patatas pequeñas
2 tomates
Albahaca
300 gr de filetes de perca
Sal
Pimienta negra
Pimentón
Harina
Aromat (Knorr) - opcional
1 limón
Mantequilla
Aceite de oliva
1. Lavamos las patatas con piel y las echamos a cocer tal cual, con una hoja de laurel y sal.
2. Secamos bien las percas con un trapo y las echamos a un bol. Añadimos harina, sal, pimienta negra, pimentón al gusto y las removemos delicadamente, hasta que queden bien impregnadas.
3. En la sartén echamos un buen trozo de mantequilla, donde freiremos las percas, colocando primero la parte de la piel hacia arriba. Cuando el filete se haya "retorcido" le damos la vuelta y freímos otro minuto escaso. Escurrimos.
4. Comprobar que la patata está cocida y sacar. Aparte cortaremos el tomate en rodajas y lo haremos a la plancha con un poco de aceite de oliva. Cortaremos el limón por la mitad en zig-zag.
5. Emplataremos las percas en abanico, las patatas con el tomate y medio limón. Espolvoreamos con albahaca.
--> Iría muy bien también espolvorear la perca con almendra fileteada.
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